CONOCIENDO LAS PRINCIPALES DIFERENCIAS ENTRE LA SAL DE MAR Y LA SAL DE MINA
LA SAL DE MINA O GEMA es producida en Colombia en las minas de Nemocón, Zipaquirá y Sesquilé en el departamento de Cundinamarca. En su estado natural, la Sal de Mina alguna vez fue Sal Marina, pero se convirtió en Sal Mina o Roca en el momento en que surgieron los continentes y esa Sal Marina se secó al interior de las montañas. La sal en roca tiene un contenido de Cloruro de Sodio del 85% y un 15% de materia orgánica en su estado natural. Es por eso que esta Sal tiene color gris con betas cristalinas.
Como en su estado natural dicha Sal no es muy comercial, las grandes Refinadoras han desarrollado tecnologías que les permite Purificar (Refinar) el producto y lograr comercializarlo para usos Industriales, Consumo Animal y Consumo Humano. En el proceso de Refinación, la Sal de Roca es disuelta en agua y dicha salmuera cruda es llevada a grandes tanques de almacenamiento con el fin de Purificarla por medio de procesos fisicoquímicos. Es así como a la Salmuera virgen se le añade carbonato de sodio y soda cáustica a fin de lograr precipitar la materia orgánica y a su vez, precipitar las trazas de Oligoelementos (54 trazas de minerales) que aporta una Sal de Mina en su estado Natural. Ya con la Salmuera Purificada, se pasan a un proceso de evaporación al vacío, donde se por acción de altas temperaturas, se logra evaporar el agua y obtener granos de Sal muy blancos, finos, sueltos y de alta pureza.
SAL DE MAR: Se obtiene a través del agua de mar, la cual es llevada a grandes cristalizadores donde por efectos de exposición solar y cálidos vientos, el agua se evapora dando origen al grano de Sal. De allí se extrae para ser sometida a un proceso de lavado y molienda en seco, lo que hace que sus granos sean más triangulares y menos blancos, pero más puros y con alto contenido de micro -nutrientes por los cuales se le denomina “LA SAL DE LA VIDA”. Posteriormente, la sal es tamizada y adicionada con Yodo, Flúor y Anticompactante si va para el Consumo Humano.
La sal marina aporta al cuerpo mayor cantidad de trazas de minerales que la sal de mina o gema indispensables para la formación de los huesos, los dientes, los glóbulos rojos, el crecimiento del cabello, elaboración de los tejidos, síntesis de hormonas y en la mayor parte de las reacciones químicas en las que intervienen las enzimas por lo cual es mejor para el consumo humano.
